lunes, 4 de enero de 2010

LA MIRADA DE UNA LATINA

Foto:
Ximena Del Solar

Cada día me convenzo más de que no hay mujeres como las latinas, sea por la razón que sea, nosotras tratamos de participar en el proceso de construir un país, protestamos, nos quejamos, trabajamos por nuestras familias, sufrimos por nuestra tierra.

Criamos a nuestros hijos y aún así, tenemos tiempo para dar un beso, hacer una rica comida y ponernos un labial.
Una de las cosas que más extraño estando fuera es nuestra conciencia latina del otro, la cual se la debemos a las mujeres. La mujer latina con su ejemplo, le enseña a sus hijos a no vivir en una esfera privada donde “yo” soy lo único importante. Las madres latinas nos enseñan a decir buenos días en el ascensor, a dar las gracias y decir por favor, son las que nos enseñan a pedir la bendición y ser familia. Las madres latinas, con todo y su vanidad, son nuestro mayor activo, es el modo en que ellas nos han instruido para ser seres sociales lo que marca la diferencia.
Lamentablemente nosotros los latinos vivimos con un grave complejo de inferioridad, pensando que todo lo de afuera es mejor, y es necesario salir de nuestros países para concientizarnos del potencial que tenemos y de los recursos con los cuales ya contamos. Yo, que ya estoy afuera, quiero invitarlo a pensar en qué extrañaría de Venezuela estando en otro país, recuerde que la grama siempre es más verde del otro lado de la cerca, y que la verdad es algo en el medio, y por eso, antes de aventurarse, tómese el tiempo para valorar y darle su merecida importancia a lo que tiene en casa, puedo casi prometerle que no lo va a conseguir en otra parte…
Escrito por:Monica Cardozo (Venezuela)