domingo, 25 de septiembre de 2011

El enojo, al igual que otras emociones dañinas que nos hacen sufrir, es la consecuencia de los malos hábitos mentales.

Consejos eficacez contra el enojo
Mejora tu salud mental con estos consejos:

1. Abrazar nuestro enojo: El maestro budista vietnamita, Thich Nhat Hanh, propone que lo primero que debemos hacer al enojarnos es reconocerlo; saber que estamos enfadados, molestos o irritados.

Abrazar nuestro enojo o frustración es el primer paso para transformarlo. Para lograrlo, toma el tiempo que necesites; hazlo mientras estés sentado o sal a caminar por unos minutos, prestándole toda tu atención.

2. Desactivar nuestros disparadores: El segundo paso es darnos cuenta de que, si miramos nuestra mente con mayor atención, en muchas ocasiones lo que lo dispara son nuestras propias tendencias o hábitos, nuestras fibras sensibles.

Con tu mente calma, recuerda algún evento de enojo. Mira en retrospectiva la situación y pregúntate: si no existiera en mí la tendencia de enojarme, ¿cómo podría hacerlo?

3. La mente es la fuente de la felicidad y del dolor: Recuerda una situación perturbadora en tu vida. Observa, sin juzgar, lo que estabas pensando y sintiendo. Examina cómo tus actos y actitudes fueron los que crearon la percepción y la experiencia que tuviste así cómo tu actitud afectó lo que dijiste e hiciste.

Piensa de qué otra manera podrías haber percibido la situación y cómo la nueva perspectiva hubiera cambiado tu experiencia. Date unos momentos para descansar tu mente y determínate a estar atento y analizar la manera en la que interpretas las cosas que te suceden. Genera la intención de ver las cosas desde una perspectiva más amplia.

4. Transformando la crítica: Examina si es verdadero o falso lo que otra persona dice de ti. Lo importante es el contenido, no la forma en la que lo dice. Si lo que dice es cierto: Ten en cuenta que tu propósito es mejorar tu vida. Esa persona, con su crítica, te está señalando algún error, por lo tanto, es bondadosa al ayudarte a ver con claridad tus defectos.


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